Franco Armani todavía no lleva ni un año en River. Lo cumplirá en enero del 2019. Sin embargo, por la importancia que tomó dentro del equipo, en Núñez lo tratan como si llevara varias temporadas defendiendo el arco. En apenas unos meses, el nacido en Casilda consiguió que nadie más se pregunte cuándo será el día que Marcelo Barovero, campeón de la Libertadores 2015, decida regresar.
Después de quedar a apenas 111 minutos de alcanzar el récord de imbatibilidad en Primera División (que le sigue perteneciendo a Carlos Barisio), Armani se convirtió en un indiscutido para los hinchas. Aunque parece que los del Millo no son los únicos que lo admiran. Y fue el propio arquero quien lo reveló en una entrevista con Marca.
«¿Te cruzaste con hinchas de Boca tras el Superclásico?», lo interrogaron. Y Armani no dudó. «Sí, y los hinchas de Boca me pidieron fotos y autógrafos. Siempre fueron muy respetuosos», aseguró con una sonrisa en el rostro. Y no es para menos. Aunque no quiso profundizar en la cuestión, no hay dudas de que obtener el reconocimiento de la gente del Xeneize es algo especial.
El arco de Boca, de hecho, viene siendo uno de los temas que más preocupaciones les generaron a los «primos». Si bien todo parecía solucionado desde la llegada de Esteban Andrada, la lesión del ex Lanús volvió a hacer sonar las alarmas. Y la prueba fue el encuentro del último jueves, por la Copa Libertadores, frente al Cruzeiro. Es que Agustín Rossi, quien se paró debajo de los tres palos, tuvo una noche para el olvido, con dudas y desaciertos.