Rolando Graña: «D’Alessio era mi fuente pero yo no soy parte de sus negocios»

l juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, sostiene que varios periodistas estuvieron implicados (con o sin conocimiento) en las maniobras de extorsión que Marcelo D’Alessio utilizó contra el empresario agropecuario Pedro Etchebest para reclamarle 500 mil dólares a cambio de que no se lo investigara en la causa de los cuadernos de las coimas que lleva adelante el fiscal Carlos Stornelli.

Según el magistrado, son cuatro los periodistas que participaron en esas maniobras de espionaje: Rolando Graña, Daniel Santoro, Eduardo Feinmann y Rodrigo Alegre

“Lo que se pretende poner de resalto es el mecanismo de espionaje ilegal mediante el cual, D´Alessio –junto con otras personas posiblemente ligadas a agencias de inteligencia- logra su objetivo en coordinación con otros actores cuya responsabilidad o no dependerá del grado de conocimiento que pudieran tener acerca de la maniobra de espionaje en la que se los hacía participar –en este caso, Rolando Graña, Daniel Santoro, Eduardo Feinmann y Rodrigo Alegre-”, consignó Ramos Padilla en la resolución de más de 200 carillas en la que dictó la prisión preventiva del supuesto abogado y lo acusa de asociación ilícita por extorsión a Etchebest.

En una entrevista telefónica con PERFIL, Graña negó tener ningún tipo de relación con  las maniobras delictivas de D’Alessio. Me parece que el juez está en una teoría un poco conspirativa. Él era una fuente conocida entre muchos de nosotros, sobre todo en cuestiones de narcotráfico. Yo lo conozco hace tres años pero no sabía ni me imaginaba que podía tener un cosa así”.

En la resolución de Ramos Padilla, el juez nombra a Graña al hacer referencia a unas declaraciones del exdirectivo de PDVSA Argentina, Gonzalo Brusa Dovat, quien denunció las presuntas maniobras de lavado de activos de esa empresa. El magistrado aseveró que el conductor de GPS “lo citó (a Brusa Dovat) en su productora, sobre la calle Humboldt, en Las Cañitas y que dicho encuentro fue breve”.

“En la mención de la resolución aparezco porque le presenté (a D’Alessio) a un directivo de de PDVSA. Fue el propio exdirectivo quien me buscó a mí. Me encontró en un café de una esquina de la Avenida de Mayo y dijo que temía por su vida, que lo habían amenazado y que creía que eran los servicios bolivarianos. Yo le ofrecí presentarle un abogado que tenía vínculos con la embajada de Estados Unidos para que tuviera una forma de judicializar esto y que le pusieran custodia, ese era d’Alessio”, explicó Graña.

Asimismo, el periodista explicó que fue el propio Brusa Dovat quien se contactó con el vía Whatsapp, donde lo tiene agendado con un nombre incorrecto. “Después D’Alessio le da la nota a (Daniel) Santoro y a (Eduardo) Feinmann, yo no lo saqué, pero si los presenté”, precisó.

La conversación entre Graña y Brusa Dovat.

© Proporcionado por Diario Perfil S.A. La conversación entre Graña y Brusa Dovat.

“Mi participación de una red de chantajes de un hombre que viene a verme a mí, la verdad es que es medio traído de los pelos. No sé cómo participaría de un engranaje de esta extorsión, yo no tengo nada que ver con Echebest, con los otros casos, ni siquiera los conocía ni trabajé esos temas. Yo solo trabajé con D’Alessio en casos de narcotráfico”, prosiguió.

El conductor de GPS afirmó que conoció al supuesto abogado tres años atrás como “un hombre de la embajada de Estados Unidos” y que no había habido ningún indicio que lo hiciera dudar de su credibilidad. “A lo largo de estos años él me pasó datos de cosas que tenían que con investigaciones de narcotráfico que para mí fueron confiables y luego se corroboraron. No tenía ningún motivo para desconfiar de él como fuente”, manifestó.

PERFIL se contactó con la embajada de Estados Unidos, desde donde aseguraron que el país no tiene vínculos con el imputado. «No trabaja ni trabajó para la DEA ni ningún otro organismo de inteligencia del gobierno de EE.UU«, aseveraron ante la consulta de este medio.

Muchos conocíamos a D’Alessio y eso no quiere decir que seamos parte de sus negocios, si hay alguien que te consigue un expediente judicial, un dato precioso, ¿por qué no lo vas a tener de fuente?”, planteó Graña.

Por otra parte, el periodista destacó que “en un primer momento todos intentaron pintarlo como un personaje grotesco, fabulador”, pero “la resolución de Ramos Padilla dice que disponía de medios sofisticados, como armas y eso es extraño”. “El hombre en algún punto tenía vínculos o con la embajada de EE.UU. o con servicios de inteligencia del Gobierno, más que lo que el Gobierno quería admitir”, indicó.

Graña anticipó que el próximo viernes va a referirse en su programa a su inclusión dentro de la resolución del juez Ramos Padilla. La razón por la que no lo hizo anteriormente es porque la semana pasada no salió al aire.