Los jugadores de Argentina y Uruguay recibieron camisetas personalizadas del Fluminense
En la previa de los cuartos de final de la Copa América, los futbolistas de Argentina y Uruguay se entrenaron en las instalaciones del Fluminense Football Club, donde fueron agasajados con un obsequio muy original: una camiseta del club con nombre y número para cada jugador, además de una para los entrenadores. Este gesto, que fue difundido por el elenco tricolor en sus redes sociales, abrió un interesante debate entre los usuarios.
El Flu ha publicado dos videos en los que se aprecia el momento en que los integrantes de cada plantel pasan por delante de un perchero y van recogiendo las camisetas personalizadas del Fluminense.
Los jugadores de la Selección Argentina pasan en grupo y tímidamente van quitando las camisetas. En la filmación se oyen algunos «gracias» aislados, como el de Nicolás Tagliafico, Ramiro Funes Mori y Juan Foyth. Luego pasan Agüero y Di María, quienes esbozan una sonrisa. Por último, Lionel Messi, quien dice «buen día» y recoge su camiseta con un gesto amigable. Por su parte, el seleccionador Lionel Scaloni, pide disculpas por no advertir que había un obsequio para él y agradece el gesto. Play
Estas imágenes fueron contrastadas por los propios usuarios de las redes sociales con las publicadas un día antes, donde se ve los jugadores de la selección uruguaya en la misma situación, aunque con una reacción diferente. Martín Cáceres es el primero en recoger su camiseta y lanzar un efusivo «gracias» en portugués. Luego Maxi Gómez, Federico Valverde, e incluso Edinson Cavani, Luis Suárez y Diego Godín, las máximas estrellas de La Celeste, estrechan la mano de cada uno de los presentes. Sobre el final, pese a sus dificultades motrices, Óscar Washington Tabárez camina hacia el perchero con una sonrisa para retirar su regalo. Play
La comparativa de ambas reacciones fue inevitable para algunos seguidores del equipo brasileño. «Me gustaron más los uruguayos», respondió un usuario. «Interesante ver como los uruguayos fueron más educados que los argentinos», replicó otro.
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