Ministerio de Salud: Semana mundial de la vacunación

La inmunización es una de las intervenciones de salud pública más eficaces en relación con el costo. En realidad, cuando reflexionamos en el marco de un programa de inmunizaciones, las vacunas no constituyen un costo sino fundamentalmente una inversión. En el Marco de la Semana Mundial de la Vacunación 2017: “Vacúnate y celebremos un futuro saludable” se propone hacer una breve reseña de esta estrategia de salud pública.
Desde el establecimiento del Programa Ampliado de Inmunización (PAI) en 1974, en las Américas se han evitado millones de defunciones y discapacidades causadas por enfermedades prevenibles por vacunación. En Argentina, este programa se ha ido afirmando con el correr de los años.
En 1970, los esquemas de vacunación incluían cuatro vacunas que protegían contra seis enfermedades (formas graves de tuberculosis, difteria, tos ferina, tétanos, poliomielitis y sarampión).
Desde la década de 1990, se fueron incorporando nuevas vacunas, hasta llegar a la actualidad, con uno de los calendarios de vacunación más amplios y equitativos del mundo. La vacunación es un derecho de todos, Argentina cuenta con un calendario nacional de 19 vacunas gratuitas, uno de los más desarrollados de la región de las Américas.
El propósito es llegar con las vacunas de Calendario a todas las poblaciones, especialmente a las poblaciones vulnerables.
Pero a todo esto hay preguntas frecuentes que tienen que ver con las vacunas….
¿Qué son las vacunas? Son productos biológicos que sirven para prevenir enfermedades infecciosas activando nuestro organismo para que desarrolle defensas específicas contra ellas. Las vacunas “enseñan” al sistema inmunológico a defenderse. Por esa razón contienen, por lo general, parte del microorganismo causante de la enfermedad o el germen entero, pero muerto o debilitado.
¿Cómo actúan las vacunas? Tras recibir la vacuna, por medio de una inyección o ingiriéndola nuestro organismo produce anticuerpos contra los gérmenes modificados que contiene. Estos anticuerpos nos protegerán frente a los agentes verdaderos causantes de la enfermedad, destruyéndolos y haciendo que no enfermemos. Esta forma de reaccionar “aprendida” nos proporciona inmunidad ante futuros encuentros con el microbio agresor.
¿Por qué debemos vacunarnos? Porque las vacunas protegen a las personas de enfermedades peligrosas. Estas enfermedades pueden tener complicaciones graves o secuelas y provocar incluso la muerte.
Algunos de estos padecimientos son ahora muy poco frecuentes, pero esto es debido precisamente al mantenimiento de las vacunaciones en toda la población.
¿Qué enfermedades evitan las vacunas? Las vacunas más comúnmente empleadas en nuestro país son las siguientes: tuberculosis, hepatitis B, difteria, tétanos, tos convulsa, poliomielitis, meningitis e infecciones generalizadas graves por Haemophilus influenzae tipo b, meningococo, neumococo; sarampión, rubeola, parotiditis o paperas, varicela, virus del papiloma humano, diarrea por rotavirus, hepatitis A y gripe.
¿Qué vacunas son gratuitas? Las vacunas gratuitas en Argentina son aquellas comprendidas en el Calendario Nacional de Vacunación. En nuestro país se implementan vacunas que cubren contra las enfermedades de mayor impacto en la comunidad, con mayor carga de enfermedad, es decir es una estrategia probada que disminuye la morbimortalidad tanto en las personas como individuos como, con un impacto rebaño, en la población general
¿Qué debe hacerse en caso de retraso de alguna vacuna? Si se ha olvidado alguna vacuna coméntelo en el centro de salud ó con su médico de cabecera. Los esquemas de vacunas tienen establecidos intervalos que hacen que sean óptimas las respuestas inmunes, dependiendo de la persona, no obstante probablemente no sea demasiado tarde. La mayoría de las vacunas se pueden administrar a cualquier edad y además, si hubiera olvidado alguna dosis no sería necesario empezar de nuevo, ya que las dosis administradas siguen contando aunque haya pasado más tiempo del aconsejado.
¿Por qué no esperar a que los niños se hagan más grandes para vacunarlos? Las vacunaciones deben empezar al momento del nacimiento, continuar tempranamente a los 2 meses, y en su mayor parte se administran dentro de los dos primeros años de vida. Al vacunar a los niños a tiempo, usted los protege de infecciones e impide que contagie a otros en la escuela o guardería. Los niños menores de cinco años son muy susceptibles a contraer enfermedades porque sus sistemas inmunológicos no han desarrollado, por sí solos, las defensas necesarias para luchar contra las infecciones.
¿Las vacunas son seguras? Las vacunas son medicamentos muy seguros, pues son sometidas a estudios estrictos antes de poder administrarse a la población y siguen siendo vigiladas incluso una vez comercializadas. No obstante, como todos los medicamentos, pueden producir efectos secundarios que por lo general son muy leves, del tipo de dolor en lugar del pinchazo o un poco de fiebre o incluso un sarpullido, dependiendo siempre de cada vacuna. Excepcionalmente, una vacuna puede desencadenar reacciones graves en personas alérgicas a ese preparado o con otro tipo de circunstancias especiales. Por eso se recomienda su control y administración por profesionales sanitarios y la permanencia en el centro de vacunación durante 15-20 minutos tras la vacunación.
¿Cuándo está contraindicada la vacunación? Aunque debe consultarlo siempre con su enfermero o su médico de cabecera, raramente está contraindicada una vacuna. Los procesos febriles importantes durante el día previsto para la vacunación pueden aconsejar su retraso, pero la única contraindicación real habitual es la alergia grave conocida a la vacuna o a alguno de sus componentes. Se podrán administrar las vacunas aunque la persona esté resfriado o esté tomando otras medicinas. El contacto con otros niños o con embarazadas o con mujeres que estén amamantando no contraindica la vacunación. Hay casos especiales donde se recomienda algún tipo especial de vacunas, como es el caso de las personas que conviven con VIH, pero aún se recomienda, y en este caso el énfasis es mayor en lograr un esquema de vacunas adecuado
¿Es posible saltear dosis de vacunas? Esto es muy importante tenerlo claro. Las enfermedades prevenibles por medio de vacunas, en general están controladas en nuestro país, pero esto no quiere decir que estas enfermedades hayan sido erradicadas. Muchos de los virus y bacterias que las producen siguen presentes y por esta razón es importante que las personas (niños y adultos), reciban a tiempo las vacunas recomendadas. Además, vivimos en un mundo globalizado, donde es posible que se importen enfermedades o que las personas se expongan por viajes a países en los que las enfermedades que se pueden evitar con vacunas son todavía hoy relativamente comunes. Si no se utilizaran las vacunas podrían volver a producirse epidemias de enfermedades evitables, lo cual causaría mayores niveles de secuelas, invalidez y muerte infantil.
“A excepción del agua limpia, ningún otro factor, ni siquiera los antibióticos, ha ejercido un efecto tan importante en la reducción de la mortalidad…”