Hablaron de sus años juveniles, de golf, de la familia y por supuesto…de política. Este jueves no quedaron dudas de que la buena sintonía personal que mostraron tener los presidentes Donald Trump y Mauricio Macri rompió cualquier molde de la diplomacia para acercar así posiciones muy estrechas entre la Argentina y Estados Unidos hacia el futuro.
Desde el inicio del encuentro en el Salón Oval, cuando Trump recibió a Macri y a Juliana Awada con su esposa Melania, el presidente norteamericano y el argentino lograron acercar las distancias que hubo durante los últimos años entre ambos países con gestos personales que nada tuvieron que ver con el protocolo de la diplomacia.
«Nos conocemos hace muchos años y lo considero un gran amigo», disparó Trump al lado de Macri para mostrarse ante la prensa. Luego comentó a modo de humorada y muy sonriente: «Yo voy a hablar de Corea del Norte y él me ha hablar de limones. Me parece que vamos a estar muy bien con ese tema», dijo.
En la Casa Blanca aseguran que para el presidente norteamericano pesa mucho más el trato personal y cercano que las reglas duras de la diplomacia. También destacaron que a varios funcionarios de Trump les llamó la atención «el cariño» con que le mostró el presidente de Estados Unidos a Macri.
Desde el gobierno argentino el jefe de Gabinete, Marcos Peña remarcó a Infobae que «nunca antes hubo una relación tan cercana entre un presidente norteamericano y otros argentino». Una muestra de ello que valoró la delegación argentina fue la actitud de Melania de dejar por unas horas su estadía permanente en Nueva York para acercarse a la Casa Blanca a recibir a los Macri.