El secretario de Derechos Humanos de la Provincia, Antonio Curciarello y la secretaria de la Mujer, Liliana Robledo, en reunión con los familiares de las víctimas del caso Eduardo “Chino” Ros, quien se encuentra prófugo de la Justicia. mantuvieron esta tarde un encuentro con la prensa en la sede de la Secretaría de Derechos Humanos.
El titular del área manifestó el acompañamiento y el apoyo a las víctimas y familiares. “Queremos acompañarlas en el entendimiento, que hasta que el condenado no esté detenido, como así lo dispuso la Justicia y lo ordenó, no habrá justicia para las víctimas”, remarcó.
Comentó también que mediante el decreto 395/18, el gobernador de nuestra provincia dispuso una recompensa de $150.000 pesos para quienes puedan aportar datos certeros sobre la localización de Ros. Quienes puedan hacerlo podrán comunicarse a la Secretaría de Derechos Humanos, a los teléfonos de la Policía, al Ministerio Público Fiscal o al 0800-333-1376. “Ahí podrán acercar datos para poner en marcha el procedimiento, tanto para la recompensa, si los datos son verídicos y permiten la localización, como para que las autoridades que se encargan de la investigación lleven adelante esos datos”, agregó.
Curciarello comentó que los familiares, como la Agrupación por la Solidaridad, se han reunido con el Ministerio de Seguridad y mantienen contacto con la Brigada de Investigación de la Policía de La Pampa, quienes llevan adelante formalmente la investigación. “En tanto el ministro de Seguridad, Juan Carlos Tierno, pidió también la colaboración del Ministerio de Seguridad de la Nación. La búsqueda está llevándose a cabo; evidentemente no tenemos resultados, pero está llevándose a cabo”, remarcó. Por último, comunicó que se distribuirá a los medios y por las redes sociales, el material surgido del decreto ofreciendo la recompensa y pidiendo la colaboración de la sociedad para saber el paradero de Ros. Por su parte, Robledo también manifestó el apoyo desde la Secretaría de la Mujer y resaltó que para que se haga justicia, Ros tiene que cumplir su condena, “para que las víctimas y sus familias estén tranquilas”, cerró.
